Cuidado: las mujeres también sufren enfermedades cardíacas

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Miércoles 21/12

Cuidado: las mujeres también sufren enfermedades cardíacas


Una de cada tres mujeres del mundo muere a causa de las enfermedades cardiovasculares; en Argentina, sin embargo, el 60% de la población femenina cree que no corre riesgo alguno de contraerlas; acá causas, consecuencias y modos de prevenirlas

Son las enfermedades que afectan a las arterias de nuestro organismo y que, si bien no discriminan por sexo, están más relacionadas con ellos que con ellas. Sin embargo, la realidad indica que el porcentaje de mujeres que muere año a año es considerable. "En la Argentina, de cada 100 mil habitantes, 250 fallecen por año de una enfermedad cardiovascular y el 40% son mujeres. El desconocimiento y la falta de información son los principales enemigos de estas enfermedades", dice la doctora Laura Brandani, jefa de prevención y rehabilitación cardiovascular de la Fundación Favaloro.

Entre las patologías más trascendentes se encuentran el infarto de miocardio (producto de la enfermedad de las arterias coronarias), el accidente cerebrovascular o ictus (producto de la enfermedad de las arterias que llevan sangre al cerebro), las enfermedades de las arterias de los miembros inferiores que producen claudicación y falta de irrigación a las piernas.

"Las causas de la aparición de estas enfermedades en las mujeres son las mismas que en el hombre (presencia de los factores de riesgo, predisposición individual a ser afectados por ellos y la carga genética), pero la diferencia es que en las mujeres, en general, estos factores son más agresivos y producen daños anatómicos más importantes que en el hombre", explica Brandani.

Por lo tanto, la prevención se hace indispensable, ya que tomar medidas a tiempo marcará la diferencia entre la vida y la muerte (y sin exagerar). ¿Cómo podemos prevenirlas? Trabajando sobre los factores de riesgo modificables. A saber: tabaquismo, sedentarismo, malos hábitos de alimentación (poca ingesta de frutas y verduras), obesidad o sobrepeso, diabetes, hipertensión arterial y alteraciones de los lípidos (colesterol y triglicéridos).

¡Atención!
Los síntomas de estas enfermedades son varios y hay que estar atentos. "Los podemos dividir en los netamente cardíacos, como el dolor de pecho, la falta de aire, la sensación de muerte inminente y el desmayo; y los de causa cerebral como la pérdida de conciencia, amnesia brusca, pérdida de la visión, parálisis de algún miembro o de la cara, dificultad en el habla o en la comprensión, etc.", dice la especialista de la Fundación Favaloro. Y suma: "Podemos nombrar los síntomas que causan las obstrucciones de las arterias de las piernas; es la llamada claudicación intermitente, que es el dolor, generalmente en los gemelos, que aparece al caminar y que calma al detenerse. A veces se acompaña de trastornos en la irrigación con cambios de coloración en la piel, palidez y cambios en la temperatura (frialdad)".

Otro de los datos a los que debemos prestar atención es la bendita herencia. "El padecimiento de enfermedades cardiovasculares tiene un gran componente genético, sobre todo en los eventos cardíacos y los factores de riesgo como la diabetes y la hipertensión arterial", dice la médica. Por lo tanto, si alguno de tus padres (o ambos) fallecieron en edades tempranas como consecuencia de alguna de estas patologías, es mejor ir al médico y hacerse un chequeo, además de llevar una buena calidad de vida, con dieta adecuada y ejercicio rutinario.

Y si no encontrás motivación alguna para cuidarte, tal vez esto ayude un poco: "Las consecuencias de las enfermedades cardiovasculares son la enfermedad propiamente dicha: necesidad de intervención con angioplastia o cirugía de by pass, infarto de miocardio, accidente cerebrovascular o ictus y muerte", dice la doctora de la Fundación Favaloro.

El después
La recuperación -en caso de que ésta sea viable- puede ser parcial o total, pero dependerá de gravedad del evento. "Por ejemplo, si el paciente tuvo una falta de irrigación transitoria al corazón y se le practicó una intervención con tratamiento y rehabilitación adecuados, se puede recuperar totalmente. Pero si el paciente tuvo un accidente cardiovascular o ictus y se comprometió gran parte de su cerebro, probablemente no logre recuperarse", grafica la especialista, quien añade un dato: una persona que sufrió un evento está más propenso a padecer otro porque sus arterias se encuentran más dañadas.

El tratamiento es muy intensivo y consiste en mantener a raya los valores de presión arterial, lípidos y glucemia. Incluye fármacos con múltiples medicamentos que tienden a prevenir un nuevo evento y también una pata no farmacológica, que se basa en ejercicio físico programado progresivo y control nutricional. "Es importante recalcar que el tratamiento es para toda la vida", concluye Brandani.



¿Sabías que el riesgo de padecer estas enfermedades depende del sexo? En general, en el hombre comienza a partir de los 40-45 años y en la mujer, después de la menopausia o después de los 55 años.


Factores de riesgo no convencionales

Hay causas poco divulgadas que pueden desembocar en una enfermedad cardiovascular. Tomá nota: Poca ingesta de frutas y verduras. Se demostró que las personas que ingieren poco estos alimentos tienen mayores chances de padecerlas (así como hipertensión y diabetes). Los factores psicosociales son igual de importantes que los otros. Hay que estar alerta al estrés, la ansiedad y, fundamentalmente, la depresión.

Cuidá tu corazón

Ése es el nombre de la campaña creada en Estados Unidos (The Heart Truth™) en el 2002 y promovida por el National Heart, Lung and Blood Institute. Allí, en 10 años se logró duplicar el conocimiento que las mujeres tenían acerca de la problemática cardíaca. En Argentina, la Fundación Favaloro y Ogilvy la llevan a cabo desde el 2009.

En ese marco, por ejemplo, este año se presentó la Colección de El Vestido Rojo, símbolo de la campaña, que dio el puntapié inaugural a los desfiles de Buenos Aires Alta Moda. Allí, diseñadores de la talla de Laurencio Adot, Claudio Cosano, Sylvie Burstin, Jorge Ibáñez y Verónica de la Canal crearon modelos exclusivos que engalanaron los cuerpos de celebridades locales.

Por Verónica Salatino