SALUDO DE NAVIDAD : Oración del Espíritu Santo (23-12-16) & Deseos
El Espíritu Santo no se deleita cuando nos escondemos de las dificultades,
cuando queremos ignorar los problemas, cuando escapamos de los desafíos que la vida
permanentemente nos presenta.
Al contrario, el Espíritu Santo es viento que empuja. Él nos invita siempre a enfrentar las
dificultades, nunca a escapar.
Porque cada dificultad que yo tenga que enfrentar será siempre una nueva posibilidad para crecer.
En cada problema que resuelvo aprendo algo nuevo, después de cada experiencia dura
que atravieso,queda siempre algo más de sabiduría en el corazón.
Ninguna dificultad es en vano, ningún sufrimiento es inútil.
Siempre, después de una tormenta de la vida, salimos renovados. Se libera algo nuevo que,
sin esa tormenta, no habríamos descubierto.
Hay muchas cosas bellas en nuestro interior que tenemos que ejercitar para que se desarrollen,
y cada nuevo desafío de la vida es esa oportunidad para desarrollarlas.
Por eso, el Espíritu Santo siempre nos mueve a enfrentar las cosas,
y nunca a retraernos como perros miedosos. Dejémonos llevar.
Fuente: “Los Cinco Minutos del Espíritu Santo” por Víctor Manuel Fernández
Que estas simples, aunque al mismo tiempo, profundas palabras actúen como una luz que
guíe nuestras vidas para que especialmente en esta Navidad que ya se acerca, podamos
también “nacer” de nuevo.
Nacer de nuevo como seres humanos que cometen errores pero que pueden
corregirlos, que tal vez ofendan o hagan enojar a alguien y puedan pedir disculpas, que no
dicen suficientes veces “gracias”
o preguntan con verdadero interés ¿cómo estás?.
Que ofrecen su ayuda, tienden una mano, ponen el hombro para
brindar su apoyo en momentos de angustia o dolor, abren sus brazos para dar un abrazo
de “oso”
a esa persona que lo necesita, o aquellos que regalan su empatía y contención, o te
alcanzan un pañuelito de papel para secar esa lágrima traviesa y rebelde que se escapa de
nuestros ojos.
Unámonos en la risa,
y se oirá más fuerte, acompañemos en los momentos más difíciles,
complicados y pesados y la carga se hará más liviana.
Tal vez si todos intentamos de a poquito poner en práctica algunas de estas acciones y
tantas otras más que salgan de nuestros corazones, seguramente nos sentiremos
renovados, más satisfechos por la buena acción del día o de la semana o del mes y de ese
modo volvamos a sentirnos felices y dichosos-aunque sea en pequeñísimas dosis- pero de
tan fuerte impacto en nuestras vidas, que estoy segura vamos a buscar repetirla una y
otra vez.
Seamos todos parte de esta Fiesta de Navidad y aprovechemos a renacer y convertirnos en
mejores personas cada día.
A todos aquellos que me acompañaron, y me acompañan, estuvieron y están, me quisieron
y me quieren, me escucharon y me escuchan y mucho más... les prometo que los
acompañaré, estaré, los escucharé, los querré aún más, y a vos también,si me esperas,
te Amaré. C.M.
Fuente Imágenes: Google Images
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